El cambio es una oportunidad no una amenaza.
El cambio es vida. La vida es cambio
¿Cómo podemos aprender que esta situación de crisis la podemos convertir en una oportunidad y no en una amenaza?
Es difícil aprender a ser optimistas realistas en una situación personal vital como la que estamos viviendo, y sobre todo, los jóvenes.
“Tenemos que animarnos”. “No tenemos que perder la esperanza”. “Hay que ser fuertes”. “Tenemos que demostrar coraje y valor apara afrontar situaciones difíciles”. Son expresiones que, actualmente, oímos con frecuencia. Pero, ¿es la respuesta ante tal situación?
Cada día aparece un nuevo libro sobre la felicidad. Pequeños programas de la tv sobre la felicidad (4 minutos para encontrar la felicidad). “Animo y que tengas suerte” es la frase tópica de casi todos cuando nos encontramos con alguien que vive en sus carnes esta situación de paro, de desahucio, de desamparo……En el fondo todos pretendemos que no “pierdan la ilusión”, que no se hundan, que sigan luchando y salgan adelante. Las intenciones son buenas y loables. Pero es suficiente?
Está demostrado que los optimistas demuestran más valor y coraje que los pesimistas a la hora de afrontar situaciones difíciles y problemáticas.
Todos los que participamos en este foro somos optimistas realistas y esperanzados. La prueba está en los post que publicamos. Por eso os propongo que aportemos ideas para que, los que están pasando por situaciones duras, puedan aprender optimismo inteligente.
El interesante post de Susana “No desde el sofá” el 8 de Diciembre pasado es un buen ejemplo.
Me llamó la atención el reportaje que publicaba “20 minutos” el 28-11-2011 sobre la cantante Rihanna. Después de que su novio le propinara una paliza que la impidió presentar la gala de los Grammy de 2009 y denunciarlo, adoptó como lema de su vida: “Nunca un fracaso, siempre una lección”
Escuchar lo justo y necesario a los medios de comunicación!!!!!!
ResponderEliminarNuria del Olmo
Exacto, porque solo nos dan a ver la cara pesimista del mundo.
ResponderEliminarPara todos ellos yo propongo que no caigan en el pesimismo ya que seguramente hay personas del tercer mundo que tienen situaciones más difices, y sin embargo van hacia delante.
Nuria Martín
Lo primero, Rafa, gran iniciativa la tuya, la de poder ayudar a la gente a ser optimistas y me alegro mucho de que te gustara mi post.
ResponderEliminarEn cuanto a lo que dices, Nuria M., yo soy partidaria de sacar la fuerza de uno mismo, y no de las comparaciones con los demás (aunque es cierto que nos resulta TAN fácil compararnos con los que nos rodean...).
Soy consciente de que en la vida hay etapas que son positivas y otras no tanto. Y lo más importante que he aprendido durante este año es que hay cosas que no podemos controlar, y que frustrarnos con ellas no nos lleva a ningún lado. Lo fundamental es aprender a aceptar las cosas como nos vienen o, en todo caso, a intentar cambiarlas (si es que podemos hacerlo).
Volvemos a una de las frases más manidas pero menos llevadas a la práctica: "hay que ocuparse y no preocuparse".
Yo recomendaría:
- "obligarnos" a darle la vuelta a las cosas "malas" que nos suceden buscando su aprendizaje, su lado positivo:
- recordarnos que no todo nos va a salir bien siempre, y que ya llegarán tiempos mejores; malas rachas hemos tenido todos (¡y las que seguramente nos quedan por venir!)
- convencernos de que siempre podemos hacer algo para cambiar nuestro estado anímico. Puede que nos lleve más o menos tiempo, pero si queremos, podemos;
- apoyarnos en quienes nos rodean y dejarnos ayudar. Muchas veces fuera de nosotros está la solución a nuestros problemas, pero tenemos que querer encontrarla. Con este post puede que ayudemos un poquito :-)
Felices Reyes.
En este caso hablamos de optimismo ante situaciones complicadas, al respecto siempre leo acerca de lo que se puede ayudar o no, precisamente la TV no creo que sea lo mejor pero bueno… Propones que aportemos ideas, todo hemos pasado, de una manera u otra por esta situación. A decir verdad lo que de verdad nos va a ayudar a cada uno somos nosotros mismo, es decir, nuestro interés por salir adelante, el optimismo es muy sencillo, “o salgo yo mismo de esta o nadir me va a ayudar”, el primer paso, desde mi punto de vista es darse cuenta que del cielo poco llueve y generalmente es agua así que de poco nos ayuda para este caso. Me parece interesante la idea que propones acerca del cambio, palabra generalmente asociada a situaciones negativas, pues efectivamente un cambio supone, por definición, una nueva situación, que en principio ni es mejor ni peor que la anterior, es diferente, eso sí, toda decisión implica una renuncia y por tanto hemos de saber renunciar a lo que no nos aporta y trabajar por lo que realmente nos aporta valor de cara al futuro, no lo que nos aportó en su día, es importante no temer al cambio, al revés, buscarlo, tomar nota de lo que somos consciente y conocemos (que es mucho) y arrancar. A partir de aquí no se si existe una fórmula para como propones aprender optimismo inteligente, entiendo que habrá tantas fórmulas como personas…
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