A lo largo de toda nuestra
trayectoria profesional, cada uno de nosotros, hemos ido adquiriendo una idea que, a estas alturas, estoy convencido de
que es bastante precisa acerca de qué es
el Liderazgo.
De alguna forma lo podemos ver
como la voluntad capaz de coordinar los recursos, las voluntades y las
inteligencias para alcanzar los objetivos… Seguro que, de una u otra forma,
todos coincidimos en esta idea.
Me parecía interesante, en este
punto, profundizar en los “pecados”
del liderazgo, en ese “caerse por el
otro lado”.
- El liderazgo NO es Voluntarismo, o sea, creer que las cosas van a suceder mágicamente, sin trabajar duro para su consecución.
- El liderazgo NO es Arrogancia, agresividad ni deseo de dominar a los demás.
- El liderazgo NO sobreviene a personas tocadas por la mano de Dios, no se debe confundir “Liderazgo” con “Carisma”, puesto que esa idea llevará a que los “líderes nacen” y, por lo tanto, será una habilidad imposible de aprenderse o desarrollarse.
- El liderazgo NO es Mito, No es “Sobrenatural”.
De todo ello, me interesa
resaltar una idea que recientemente exponía en este foro el maestro Jesús Alcalde: “El liderazgo no lo resuelve todo. Nos da
visiones, pero no resuelve el día a día. Necesitamos la práctica, la gestión……”
y añadía “Si solo hacemos énfasis en el liderazgo, el modelo resulta hueco o
lleno de propaganda (con perdón de los de marketing).”
No puedo estar más de acuerdo. A
esto lo llamo “CAERSE POR EL OTRO LADO”.
Creo que debemos huir de visiones mágicas, casi esotéricas del liderazgo y, más
aún, del líder individual. Debemos huir de escenarios donde la única verdad es
la “revelada por el Jefe”.
El liderazgo es Visión, es
Influencia, es Empatía, pero también es Gestión, Aplicaciones, Procesos, Herramientas,
Resultados… todo ello es Realidad.
Como dijo Gandhi, estos son Los 7
pecados del Liderazgo, capaces de destruir una Organización o una Persona:
- Riqueza sin trabajo
- Placer sin conciencia
- Conocimiento sin carácter
- Comercio sin moralidad
- Ciencia sin humanidad
- Religión sin sacrificio
- Política sin principios.
Está bien esto de los pecados del liderazgo..., que te hacen caer al otro lado.
ResponderEliminarGracias, Vicente, por llamarme maestro. Es un bonito reconocimiento que te has ganado tú y los que escriben en el foro.
Jesús Alcalde
Jesús:
ResponderEliminarPor mi parte te aseguro que lo de maestro no es retórico. Es real y sincero.