Pese a ello no significa que en España no se lleven a cabo diferentes medidas en las empresas, si no que se realizan en menor medida. Lo que nos lleva a pensar que poco a poco esta situación irá cambiando para mejor.
Las principales diferencias que encontramos respecto a países como Finlandia, Suecia, Dinamarca o Luxemburgo son la flexibilidad horaria, los permisos por paternidad o las ayudas percibidas por parte de las instituciones públicas.
Mientras que en España la mayor parte de las empresas son quienes definen los horarios de los trabajadores, en países como Finlandia nos encontramos que más de la mitad de las empresas tienen horarios flexibles. Y debemos entender que no consiste en pasar cuantas más horas en el puesto de trabajo, si no en el tiempo que nos encontramos en él ser productivos y hacer un buen uso del tiempo.
Otro punto importante es el tema de las bajas por paternidad, donde nos encontramos muy lejos de la media europea, al contrario que Suecia donde el tiempo por baja supera en más del doble al de la media.
Sin embargo, todos estos cambios no son sólo trabajo de las empresas, sino que también debe haber una implicación por parte de las Instituciones, puesto que en este sentido vemos que en Luxemburgo se reciben casi diez veces más ayudas que en España a la paternidad.
Un efecto de todo esto es que la media de edad a la hora de tener el primer hijo está en los 30,4, frente a los 28,7 de la media de Europa. Ya que anteponemos la carrera profesional a la vida familiar hasta que se logra tener cierta estabilidad.
Por lo que podemos concluir, que para lograr una implantación progresiva de medidas o mejorar las que ya se están realizando, va a hacer falta un fuerte implicación y compromiso tanto por parte de las empresas, dándole un impulso a la aplicación de diferentes medidas, y trabajadores, respondiendo en sus puestos de trabajo y cumpliendo sus objetivos; como por parte de las instituciones públicas. Para que con todo ello se pueda compaginar de una manera más sencilla la vida laboral y personal, y que la familia vuelva a estar en un primer plano.
Excelente post, Javier. Uno de los grandes retos que tenemos como profesionales de los Recursos Humanos es conseguir cambiar esa tendencia. Como dice Machado "paso a paso se hace camino al andar".
ResponderEliminarJavier, muy buen post, espero que logres mover conciencias y sea como dices, yo también pienso que poco a poco la mentalidad de las empresas en cuanto a facilitar la conciliación va cambiando, aunque aún queda mucho para alcanzar a nuestros vecinos del norte de Europa. Hablar de ello, de su necesidad y de los beneficios económicos que este tipo de medidas aporta a las empresas, ayuda seguro.
ResponderEliminarEnhorabuena Javier. Un post donde en pocas palabras y con datos indirectos, consigues que podamos responder a tu pregunta. Sí, estamos listos. Ahora solo hace falta que organismo, empresa y trabajador, se reconcilien y se lo crean...."el futuro son las personas y entre todos tenemos que cuidarlas".
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