jueves, 19 de enero de 2012

SECUENCIA DE "LA MOCHILA" DE "UP IN THE AIR".METÁFORA SOBRE LA COMPETENCIA DE LA MOVILIDAD por JOSÉ HERRADOR



Me llamó la atención cuando la vi por primera vez. George Clooney representaba un consultor sin alma encargado de despedir a cualquier directivo o trabajador por el que le pagaran. Y lo hacía eficientemente. En la secuencia de la mochila explica a un grupo de profesionales las condiciones para desempeñar esta profesión. Lo hace a partir de una metáfora. En la enciclopedia sobre metáfora explican que viene (del griego metá o metastás: ‘más allá, después de’; y phorein: ‘pasar, llevar’) consiste en la identificación de un término real con un término imaginario. Establece una relación de identidad total entre dos seres, reflexiones o conceptos, de tal manera que para referirse a uno de los elementos de la metáfora se organiza el nombre de otro. Significa comparar dos elementos sin ocupar nexos. Los docentes y profesionales del cambio la utilizan frecuentemente a para ayudar a descubrir los cambios a realizar.

La metáfora es “la mochila” que al igual que es utilizada por George Clooney en sus diferentes conferencias, termina por provocar un cambio y un cambio doloroso en su paradigma de la vida.

En la primera fase invita a reflexionar a los presentes sobre la carga que tienen en su mochila. Carga de cosas: coche, apartamento, y otros enseres. Les invita a moverse con toda esa carga. Evidentemente es muy difícil. Si se quieren mover deben descargar la mochila de todo lo que no sea útil para su oficio, de tal manera que les permitan ir y hacer lo que de verdad desean.

En la segunda fase de la mochila les invita a reflexionar sobre las relaciones y cómo éstas pueden ser muy paralizantes.

En la tercera fase la reflexión es para él mismo. Se encuentra sólo y sin COPILOTO para su vida. Su gran cambio y cambio paradójico es pasar de despedir a recomendar para un trabajo y hacer que se comprometan con un proyecto. Toda su vida construida volando y volando, pasando de un lugar a otro, sin darse cuenta del impacto de su acción en las personas se desmorona. Se encuentra solo y cuando busca una compañera de viaje fracasa estrepitosamente. Es víctima de su modo de hacer. El dinero y la independencia no lo son todo.

En estos tiempos de crisis y de terrible paro la movilidad es una capacidad a desarrollar y promover. Es necesario moverse hacia donde hay trabajo. Esto no es fácil. Implica renunciar a tu tierra, a tu familia, a tus amigos. Es la vida del emigrante que tiene que adaptarse a nuevos mundos y culturas. Supone integrar nuevos valores y paradigmas muchas veces contradictorios con la educación recibida. Supone arriesgar, estar solo mucho tiempo. El mundo se ha hecho pequeño gracias a los medios de transporte y de comunicación. Los ritmos de aprendizaje y cambio son nuevos. En la prensa se comenta, que se está iniciando en España un movimiento migratorio muy importante de jóvenes y no tan jóvenes hacia los países del norte de Europa, como hacia los llamados países emergentes. Esta es una nueva realidad que no se conocía desde la década de los años sesenta. En el periódico El País de 30-09-07 ya se nos apuntaban algunos de los beneficios de la movilidad:

  1. La relación se retroalimenta ya que las personas que se mueven tienden a mayores posibilidades de mejorar la situación laboral y económica y volver a cambiar de residencia o trabajo en tiempo. El 59% de los que se mueven entre Estados encuentran trabajo frente al 35% de los que no se mueven.
  2. Tener idiomas abre puertas a más y mejores empleos.
  3. Los empleados con experiencia en movilidad están más capacitados para afrontar los cambios., desarrollar nuevas actividades, habilidades y conocimientos.
  4. La ley favorece la movilidad al duplicar las reducciones que rebajan los rendimientos netos del trabajo.
  5. La movilidad laboral es una forma de reducir las rigideces del mercado laboral. El trabajador va donde está el puesto de trabajo. Una mayor movilidad aportaría mucho en términos de productividad y tasa de paro.
  6. Europa quiere que nos movamos: La RED EURES, creada por la Unión Europea, ha celebrado más de 500 actos para dar a conocer más de 1.500.000 de empleos vacantes. Los puestos sin cubrir en Europa son más de 3 millones.
La movilidad también puede integrarse en el modo de trabajar de las empresas. El sistema llamado Flexible working es un ejemplo de lo que se está implantando como modo de facilitar la conciliación de lo laboral y familiar. Tiene las siguientes carácterísticas:

  1. Proporciona un marco para la movilidad del empleado, donde él puede elegir en función del papel que desempeña, su agenda, objetivos y preferencias, el lugar más adecuado para desarrollar su actividad.
  2. Evita en los posible los despachos y los puestos de trabajo con nombre propio y trata de ofrecer soluciones comunes para el desempeño de las diferentes actividades profesionales.
  3. Nuevo concepto de oficina que sustituye los puestos de trabajo tradicionales y fijos por zonas de trabajo flexibles (áreas de trabajo informal, salas de reunión, espacios para llamadas telefónicas o trabajo concentrado, zonas plug & work, entre otras) que proporcionen al empleado un espacio de calidad en el momento que lo necesite.
  4. Necesidad de una política de mesas limpias para facilitar la flexibilidad, así como los servicios y herramientas adecuados: portátil, ADSL, etc.
En el film se nos presenta al principio la movilidad como un gran valor, sin ataduras de ningún tipo. El actor es una persona sin alma que se permite tomar decisiones duras sin mirar atrás. Por encima de todo evita comprometerse con nada ni con nadie. El dinero y lo que conlleva es la única finalidad, hasta que descubre la persona y sus emociones a través de dos mujeres. Una joven becaria inteligente que es capaz de cambiar a tiempo y una mujer, profesional como él, que es capaz de una doble vida. Siente que puede querer de verdad y entonces descubre que le han engañado y…

De esta historia sobre la movilidad nos pueden surgir numerosas preguntas. Cada uno desde su propia historia:
¿Cómo es mi mochila? ¿La tengo muy cargada o es suficientemente ligera y adaptada para el oficio que desempeño o aspiro a desempeñar? ¿Qué me sobra o qué me falta? ¿Cuáles son mis relaciones y el nivel de profundidad de las mismas y con quién? ¿Qué conocimientos tengo y qué conocimientos necesito adquirir? ¿En qué soy más fuerte que muchos? ¿Qué competencias emocionales y grado de las mismas? ¿Qué nuevas relaciones debo emprender? ¿Quién me puede acompañar como copiloto en mi vida? ¿A qué estoy dispuesto a renunciar? ¿A qué no estoy dispuesto a renunciar? Etc...

8 comentarios:

  1. Gracias José,
    Comparto el Post con la gente de DO, les resultará muy interesante después de haber estado hablando de ello.

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  2. Luisa Herrero Cabrejas19 de enero de 2012, 17:38

    Muy interesante José. Moverse es aprender a cambiar, y hay que moverse en todos los terrenos, no sólo físicamente, sino también de sector, en competencias y en visiones rígidas. Por cierto, el vídeo no se ve. Tiene censura de copyright, al menos en mi ordenador. Gracias. Luisa Herrero

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  3. Me gusta mucho el enfoque "humano" que siempre imprimes en tus comentarios. Lo que expones es una realidad dura pero a la vez una posible oportunidad de desarrollo personal y profesional. Creo que las 2 últimas cuestiones son claves para realizar esa movilidad:
    "¿a que estoy dispuesto o no dispuesto a renunciar?".

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  4. Muy interesante la reflexión que nos propones.
    Realmente un cambio de trabajo implica otros muchos cambios en las relaciones. Es cierto que según como se valoren los factores que entran en juego (incluidos los emocionales), puedes considerarlo positivo o no, según sean el valor que das a lo que pierdes y a lo que ganas.
    Ningún cambio aporta todo ventajas o todo inconvenientes, y en donde sería fácil decidir. Pero decirle NO al cambio, es un problema, ya que que todo crecimiento implica cambio. Por eso, cuando llega la encrucijada, tenemos que reflexionar con un pelizco emocional... Y todos cruzamos por varias de esas encrucijadas en la vida.

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  5. Sentimos que el vídeo, por derechos de copyrihgt, no se vea, pero nos tememos que no podemos hacer nada por ello más que animaros a ver la película en la que está la escena en que José Herrador se cimienta para su post, Up in the air .

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  6. Para mí, con mucho, la mochila más difícil de llevar es la interna, la de nuestros miedos, dudas, frustracciones, desconfianzas, prejuicios,... Porque además creo que para las externas, siempre y cuando las hayamos elegido nosotros, lo único que hace falta es unos anchos hombros, unas piernas fuertes y voluntad para desplazarnos con ellas.

    Y ya puestos a recomendar, sobre el tema de "movilidad física" que comentas José, recomiedo a más no poder no una película sino una serie que trata este tema desde el lado más humanos, "Vientos de Agua". Las historias, contadas en paralelo con maestría y máxima humanidad, de un minero asturiano que emigra, en plena guerra civil española, a Argentina y la de su hijo, arquitecto, que tras el "corralito", ha de venir a España a buscar "laburo" dejando en Buenos Aires a su familia.

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  7. Informamos que esta entrada ha tenido, hasta hoy (dos semanas después de su publicación -se nos pasó notificarlo a la semana de publicación-), un total de 156 visitas.

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  8. A veces miramos pero no vemos... o no queremos ver, lo cierto es que lo que pones es una realidad muy cercana. Personalmente tengo compañeros que ya les ha tocado de lleno la nueva situación. Los grandes grupos multinacionales, no saben de fronteras solo entienden de rentabilidades y ganar dinero, y en un momento critico como el que atravesamos suelen ofrecer dos alternativas: el paro o trabajo en otro país.

    Tienes mucha razón, hay que estar preparados. Se debe analizar lo que tenemos en la mochila, por si acaso nos toca.

    Gracias "Herrador".
    Saludos.
    Frank

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